Pasado el tiempo las transformaciones históricas van dejando desactualizadas normas jurídicas. Nuevas leyes reemplazan a las anteriores. Por eso los estados recurren periódicamente a una especie de purga de leyes.
En la purga actual la ley 1420 de educación, dictada en 1884, va a ser
derogada y reemplazada por la “moderna” ley de educación nacional (Nº 26.206).
No es mi intención ahora discutir la ley 26.206 pero sí señalar dos
aspectos de la 1420 que no pueden ser dejados de lado.
El primero es el artículo 5to.
De una simpleza apabullante. Una escuela
cada 1000 a 1500 habitantes (en los territorios cada 300 a 500). Uno puede
adaptar el número a la urbanización actual pero el principio es válido. No
importa porcentaje del presupuesto ni montos difíciles de discutir para la
población. Cada tantas personas hay que construir una escuela. Listo.
El segundo es el famoso artículo 8vo.
La enseñanza es laica, la
enseñanza religiosa sólo podrá ser dada a los niños que ya profesen esa
religión y fuera del horario de clase.
Con la derogación de la ley 1420 desaparece el principio laico que la
nueva ley de educación no menciona.
¿Es este el comienzo de una avanzada religiosa?
No. No el comienzo por lo menos.
En 1958 la lucha por la educación laica enfrentó a
docentes y estudiantes con el frondizismo. Hoy mismo hay educación pública católica
en algunas provincias, por ejemplo Salta y Tucumán. Pueden verlo en el video.
En la laica Capital Federal no se ha llegado a eso pero hay escuelas públicas
dedicadas a santos (la 6 del DE 8 "San José de Calasanz" y la 18
del DE 19 "San Juan Bautista de la Salle") y a la Virgen (la 27 del
DE 7 "Virgen Generala" y la 14 del DE 11 "Hogar Naval
Stella Maris”).
Hay otras que recuerdan a religiosos pero en función de su tarea política
en distintos momentos de la historia argentina. Un caso especial es la 16 del DE
17 "Rdo. Padre Agustín P. Nores"
Parece que el padre Nores era simplemente un sacerdote pero “algunos
relatan que un día se le apersonó, nada menos que Satanás diciéndole que lo
vendría a buscar el día de la partida de este mundo a lo que este contestó que
tendría que vérselas con su alma. Llegado ese momento, cuenta que en los
jardines del seminario, al día siguiente, aparecieron varias plantas pisoteadas
y caídas al parecer causadas por el enfrentamiento. Dicen que el padre Nores en
su lecho de muerte esbozaba una leve sonrisa, motivada seguramente por el
triunfo de su alma contra el Maldito”. Imagino a un maestro de la escuela
tratando de que los chicos no pisen las plantas y ellos disculpándose por la
presencia del Diablo. De acá a los exorcismos, un paso.
No falta el que argumentará que la falta de dimensión religiosa limita
a la persona. En parte es cierto, por ejemplo hoy en Clarín me enteré que la
virgen María había muerto. Parece que desde hace 2000 años se venía discutiendo
eso ya que la muerte es consecuencia del pecado y la madre de dios está libre
del mismo (sin pecado concebida). Los defensores de esa postura sostenían que
se había dormido y en estado de “dormición” (sic) había subido al cielo.
El caso se complicaba pero por suerte Juan Pablo II antes de morirse
dictaminó que si el hijo había aceptado la muerte la madre no podía no
hacerlo. Y sanseacabó.
La culpa de la muerte la tiene el que peca, las personas se duermen y
ascienden al cielo, pisotean plantas en su lucha contra el diablo, …la
educación no puede ser esto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario