Un balance

Ayer 2 de diciembre terminó una etapa de la lucha docente que había arrancado a principios de octubre.  Frente a la Jefatura de gobierno hicimos un acto en repudio a la patota del jueves a la mañana, a la represión gubernamental del jueves a la noche y a la sanción de la ley que elimina las Juntas de Clasificación y Disciplina. Como todas las otras veces estábamos los docentes acompañados por los alumnos.  

De este párrafo quisiera extraer algunas conclusiones:

1.- Frente a toda la cháchara de la discusión “democrática” de los “representantes del pueblo en la legislatura” “avalados por los votos” es necesario advertir que el estado está dispuesto a reprimir todo disenso: en forma “directa” y/o  “tercerizada”.

2.- Los estudiantes están. No parece, strictu sensu, “su” lucha. Pero han comprendido que sí lo es, y están, y marchan, y pelean. Y presentan argumentos, y proponen caminos. Están.

3.-  Ayer escuché que a partir de una derrota uno puede extraer enseñanzas. Es cierto. Pero es más agradable gozar de las conquistas arrancadas por las victorias.

Nos recompondremos, haremos reuniones y asambleas, veremos cómo continuar pero en aras de un balance me gustaría citarme, esto lo escribí el 3 de octubre en este blog:

Mañana marcharemos juntos con miembros de sindicatos que siguen siendo funcionarios del gobierno de Macri (Roberto Angrisani, de UDA, redactor del memorándum que judicializaba las tomas estudiantiles, p.ej) o representantes del gobierno nacional (Tito Nenna, legislador porteño) que reprimió la protesta de los docentes de Santa Cruz con carros hidrantes.

Mañana haremos paro y nos movilizaremos. Mañana y pasado y pasado deberemos tener en claro con quiénes contamos.

Hoy el balance del sindicato mayoritario, la UTE, falsamente triunfalista, dice: “el macrismo no pudo imponer su proyecto”. Esconden la realidad para esconder su responsabilidad. La frase es cierta en su literalidad: fruto de su propia debilidad el macrismo debió consensuar con el proyecto similar del diputado Abrevaya de la Coalición Cívica. Ese proyecto tuvo el aval de gremios como UDA y Amet,  Tito Nenna  de la UTE le votó una semana antes a Macri el presupuesto, la Ctera no consideró la posibilidad de llamar a un  paro nacional ni siquiera luego de la represión.

Tenemos que tener en claro con quiénes contamos